Un buen clima para el fútbol hizo que en el estadio Caminreal Stadium se reunieran 223 personas para disfrutar de un vibrante encuentro y de un fenomenal ambiente. Bataneros alineó a sus hombres mediante una formación 5-4-1. Alineación: Alves - Čeladinský, Portugal, Puppolo, Eggenkamp, Pisonero - Brandín, Meccio, Barreiros, Selvini - Puget.
Jekubense se decantó por una formación 3-5-2. Dispusieron a los siguientes jugadores: Stjärnlind - Segarra, Amenabar, Quesada - Cortejana, Aguilo, Erasun, Gotxikoa, Ballado - Cirueña, Gámez.
Jekubense eligió un planteamiento creativo para el partido. El nombre de Gilberto Selvini se oyó por todo el estadio tras su golazo en el minuto 2. Entró por el centro y tiró sin pensárselo dos veces, poniendo a Bataneros arriba en el marcador. 1 - 0. Bataneros parecía no estar seguro de cómo jugar, por lo que su organización se resintió y bajó a un nivel pobre. Bataneros se puso 2-0 cuando Alejandro Portugal peinó un córner con dirección a la media luna habilitando a Antonio Puppolo, que empalmó la bola. El balón salió disparado al palo largo, haciendo vana la estirada del arquero. Martín Pisonero se asemejó a un inexperto juvenil en el minuto 24 al regalar el balón a un oponente. Para su fortuna, la jugada no terminó en gol. El jugador de Bataneros Antonio Puppolo vio la tarjeta amarilla en el 25 por una entrada dura a ras de suelo. Jekubense se vio forzado a realizar una sustitución cuando Joaquim Segarra no pudo seguir jugando debido a varios golpes que recibió durante el partido. El jugador que saltó a la cancha en su lugar fue Joaquín Moleiro. El marcador reflejaba un 2 - 0 cuando el árbitro pitó el final del primer tiempo, momento en que los aficionados aprovecharon para tirar rollos de papel higiénico al campo, y más de uno dio en la cabeza de un guardia de seguridad. Bataneros marcó la pauta estos minutos, con un 57% de la posesión del esférico.
Tras la pausa, el técnico de Bataneros repasó la táctica con sus jugadores, para conseguir un nivel aceptable de organización. Bataneros aumentó su ventaja a 3 - 0 cuando Amaro Barreiros entró por banda izquierda y soltó un zurdazo que hizo que el portero intentara cubrirse más que atrapar el esférico. Corría el minuto 59. Después de una fantástica serie de regates de Joeri Eggenkamp por el centro, seguida de un tiro desde fuera del área en el minuto 73, Bataneros pudo haber ampliado su ventaja. Sin embargo, Viktor Stjärnlind logró que los locales no se fueran más lejos. Bataneros aseguró la ventaja en el minuto 86, cuando Carlos Brandín cogió el balón por el centro, hizo un amago y chutó, poniendo el 4 - 0 en el marcador. Tras esto, los jugadores de Bataneros decidieron echar el autobús atrás y aguantar el resultado en su terreno. Jekubense hizo una sustitución en el minuto 88. Lehior Gotxikoa se llevó los aplausos de su afición cuando salió cojeando del terreno y fue sustituido por Alejandro Eguizábal. El dueño del esférico en esta mitad fue Bataneros, con una posesión del 58%.
El jugador más desequilibrante de Bataneros fue, sin duda alguna, Dani Puget. Sin embargo, Daniel Alves no cumplió con las expectativas y fue el peor de su equipo. El mejor jugador de Jekubense fue Jordi Gámez. Por otro lado, Joaquín Moleiro tuvo un mal día y jugó por debajo del nivel de su equipo, no pudiendo cumplir como todos esperaban. El partido acaba en 4 - 0.
Jekubense se decantó por una formación 3-5-2. Dispusieron a los siguientes jugadores: Stjärnlind - Segarra, Amenabar, Quesada - Cortejana, Aguilo, Erasun, Gotxikoa, Ballado - Cirueña, Gámez.
Jekubense eligió un planteamiento creativo para el partido. El nombre de Gilberto Selvini se oyó por todo el estadio tras su golazo en el minuto 2. Entró por el centro y tiró sin pensárselo dos veces, poniendo a Bataneros arriba en el marcador. 1 - 0. Bataneros parecía no estar seguro de cómo jugar, por lo que su organización se resintió y bajó a un nivel pobre. Bataneros se puso 2-0 cuando Alejandro Portugal peinó un córner con dirección a la media luna habilitando a Antonio Puppolo, que empalmó la bola. El balón salió disparado al palo largo, haciendo vana la estirada del arquero. Martín Pisonero se asemejó a un inexperto juvenil en el minuto 24 al regalar el balón a un oponente. Para su fortuna, la jugada no terminó en gol. El jugador de Bataneros Antonio Puppolo vio la tarjeta amarilla en el 25 por una entrada dura a ras de suelo. Jekubense se vio forzado a realizar una sustitución cuando Joaquim Segarra no pudo seguir jugando debido a varios golpes que recibió durante el partido. El jugador que saltó a la cancha en su lugar fue Joaquín Moleiro. El marcador reflejaba un 2 - 0 cuando el árbitro pitó el final del primer tiempo, momento en que los aficionados aprovecharon para tirar rollos de papel higiénico al campo, y más de uno dio en la cabeza de un guardia de seguridad. Bataneros marcó la pauta estos minutos, con un 57% de la posesión del esférico.
Tras la pausa, el técnico de Bataneros repasó la táctica con sus jugadores, para conseguir un nivel aceptable de organización. Bataneros aumentó su ventaja a 3 - 0 cuando Amaro Barreiros entró por banda izquierda y soltó un zurdazo que hizo que el portero intentara cubrirse más que atrapar el esférico. Corría el minuto 59. Después de una fantástica serie de regates de Joeri Eggenkamp por el centro, seguida de un tiro desde fuera del área en el minuto 73, Bataneros pudo haber ampliado su ventaja. Sin embargo, Viktor Stjärnlind logró que los locales no se fueran más lejos. Bataneros aseguró la ventaja en el minuto 86, cuando Carlos Brandín cogió el balón por el centro, hizo un amago y chutó, poniendo el 4 - 0 en el marcador. Tras esto, los jugadores de Bataneros decidieron echar el autobús atrás y aguantar el resultado en su terreno. Jekubense hizo una sustitución en el minuto 88. Lehior Gotxikoa se llevó los aplausos de su afición cuando salió cojeando del terreno y fue sustituido por Alejandro Eguizábal. El dueño del esférico en esta mitad fue Bataneros, con una posesión del 58%.
El jugador más desequilibrante de Bataneros fue, sin duda alguna, Dani Puget. Sin embargo, Daniel Alves no cumplió con las expectativas y fue el peor de su equipo. El mejor jugador de Jekubense fue Jordi Gámez. Por otro lado, Joaquín Moleiro tuvo un mal día y jugó por debajo del nivel de su equipo, no pudiendo cumplir como todos esperaban. El partido acaba en 4 - 0.
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